Video: Sevilla sufre una oleada de robos de catalizadores de coches

2022-08-13 13:24:27 By : Mr. Ruiming Liu

TEMAS: Osasuna - Sevilla Directo Corte Tráfico Las Razas Alerta Sequía Sevilla Virgen de los Reyes Betis - Elche Toro Nagashi Puente Agosto Andalucía Perseidas 2022 WhatsAppFacebook Twitter Telegrama Youtube Instagram FlipboardConsulta en PDF toda la información en tu dispositivo favoritoLos ladrones reponen estas piezas de tubos de escape que contienen rodio, paladio y platinoLa suba del precio de los metales ha disparado los delitos y varios se cometen cada díaLa Policía mantiene una investigación abierta y descarta que haya bandas organizadas dedicadas a estos robotsJuan José Fernández, del taller Escapes San Jerónimo Duramás, muestra un catalizador./Antonio PizarroEl aumento del precio de los metales como el paladio ha provocado una oleada de robots de catalizadores de autocares, una pieza del tubo de escape del vehículo que contiene este y otros metales.Los catalizadores están compuestos por un revestimiento cerámico y el interior incluye paladio, rodio y platino.El primero de estos elementos ha subido enormemente de valor en los últimos meses, hasta el punto de superar al oro.Esto ha dado lugar a un auténtico campo petrolero de robots sobre el terreno en Sevilla, así como en toda España.El catalizador es una especie de filtro, un dispositivo que sirve para controlar y reducir la emisión de gases tóxicos del vehículo.Hay autocares que se han incorporado a una estructura interna, pero son más difíciles de robar porque habrían causado daños graves al vehículo.Pero hay otros modelos que llevan en la parte baja del autocar, soldados al tubo de escape.Estos son los que se están restando.Fuentes de la Policía Nacional confirmaron a este diario esta denuncia de robots catalíticos y explicaron que hay una investigación abierta para poder detener a los autores de estos delitos.Todos señalan que no es una banda organizada, una campana de delincuentes comunes que se dedican a sacar estas piezas para revenderlas en chatarrerias o desguaces que se compran clandestinamente.Son ladrones que solo actúan individualmente, aunque sean muy activos.De hecho, algunos de estos robots han quedado grabados en vídeos que están en poder de la Policía y que están siendo revisados ​​para intentar identificar a los autores de los delitos.Los robots se producen a plena luz del día, como el que se reproduce a continuación, que se grabó el pasado fin de semana en una calle de San José de la Rinconada.Cuando se puede ver al ladrón tomado en el sur, en el costado del autocar y manipulando algo en los pisos inferiores.Los delincuentes suelen estar provistos de máquinas radiales o sierras portátiles, que funcionan con batería, para poder cortar las piezas.Se realiza de forma muy delicada, provocando daños en el vehículo si es necesario.Los ladrones saben por qué necesitan ser cortados para extraer el catalizador lo suficientemente rápido.Luego, estas piezas son compradas por terceros.Se retira el revestimiento cerámico y se eliminan los metales, que se funden y se envían a China, donde existe una gran demanda para fabricar nuevos elementos con estos materiales.Un mecánico de Duramás explica cómo cortar los convertidores catalíticos./Antonio PizarroEl sistema es muy similar al del cobre, que en la jornada subió de precio y provocó una verdadera epidemia de atracadores, hasta el punto de que los ladrones se llevaron las planchas de los despachos profesionales, así como numerosas maquinarias y cableados que se llevaron a cabo. por la prohibición y extraer el metal.También pasó con el oro, especialmente durante los años de la crisis económica de finales del 2000, cuando proliferaron los negocios dedicados a la compra de oro, sobre los cuales la Policía tuvo que establecer una vigilancia porque muchas de las alegrías que les llegaban fueron sustraídos.Los catalizadores proporcionan una referencia escrita, en base a la cual se sabe que queda la cantidad de paladio, rodio y platino.Según este número de referencia, que se puede consultar en internet, los compradores ilícitos pagan más o menos a los ladrones.Las cantidades son muy variables, pudiendo fluctuar desde los 50 euros hasta los 700, según indican fuentes del sector.Infografía sobre el robot catalizador./ Departamento de Infografía.Los ladrones están optando por robar las piezas de los viejos vagones, pero son las que más metal quedan.Los nuevos siguen llevando estos elementos, pero en menor medida, por lo que son menos valiosos para los delincuentes.Entre los autocares más afectados se encuentran Volkswagen Golf, Lupo, Polo o New Beatle, Seat Arosa o León y también todos los terrenos.Buscan sobre todo autocares altos, en los que sea fácil poder acceder a los bajos para cortar los catalizadores.Los robots en los autocares antiguos generan un problema añadido a las víctimas.Los robots pueden cubrir el seguro, pero en ocasiones los daños generados o la pieza extraída son más caros que el valor actual del autocar.En tales casos, las empresas suelen declarar los vehículos como pérdida total y sólo pagan lo que vale el autocar, debiendo ser el dueño quien corre con los gastos del alquiler.Este crimen no es absolutamente nuevo.Durante más de una década, en Sevilla se robaron muchos catalizadores del Renault Clío, que también contenían metales preciosos.Sin embargo, esta empresa petrolera fue detenida y los delincuentes se dedicaron a otros metales como el cobre, que encontraron en otras instalaciones e incluso en la vía férrea.La subida del paladio provocó un recorrido de esos robots.En 2018 tuve un recorrido por estos crímenes.En aquella ocasión, las Fuerzas de Seguridad contaron con una banda de delincuentes de Europa del Este dedicada a él.La parte inferior de un vehículo con el convertidor catalítico sustraído./Antonio PizarroEste periódico visitó un taller especializado en reparación y reemplazo de convertidores catalíticos, y todo lo relacionado con el tubo de escape en general.Se trata de Escapes San Jerónimo Duramás, donde incluso necesitas ayudar a otros talleres a instalar los catalizadores, ya que es un negocio que tiene muchos años de experiencia en un sector tan especializado como este.Durante los últimos meses, los mecánicos de esta empresa han visto crecer el número de vehículos con los catalizadores cortados que han llegado a sus instalaciones.Actualmente están recibiendo un promedio de dulces entrenadores a la semana.“Nos hemos venido a quedar sin existencias y hemos tenido que pedir al fabricante, que es italiano, que nos mande más”, explica Juan José Fernández, uno de los responsables de la tienda.Sin embargo, mientras explica todo lo relacionado con los catalizadores, Fernández escucha el ruido de un autocar que se acerca y dice "hay otro".De hecho llega un Volkswagen Golf sin catalizador.Se distingue por un ruido inconfundible, como el de un coche deportivo.Los catalizadores también varían de precio según el modelo de autocar.Una tarta normal puede costar entre 300 y 400 euros, pero hay vehículos en ellos a los que el robot les hace mucho daño.Es el caso de modelos como el Honda CRV, en los que el catalizador va provisto de cables y sonda.En estos casos, la colección puede pagar 2.000 euros a costar.Un trabajador más alto explica dónde va el catalizador en los espacios para autocares./Antonio PizarroEn esta empresa instalan convertidores catalíticos universales, que sus propios mecánicos sustentan el resto del escape.Pero también pasa que, cuando ponen los catalizadores originales, se los roban.Los ladrones suelen moverse por la referencia de que traen las piezas, con las que se puede saber qué cantidad de metal les queda y, por tanto, cuánto van a pagar en el mercado negro.“La mayoría de los carros que nos llegan son vehículos más viejos. Los nuevos tienen más tecnología y menos metales. Porque no los quieren. Es un problema, porque la mayoría de los carros que nos llegan son trabajadores. , añade Fernández, que explica que de momento sus proveedores en Leshan han subido el precio a pesar del aumento de la demanda.Si bien la mayoría de los robots se han encontrado en la calle, algunos se han encontrado en el interior de los garajes.Pero la habitual es en la vía pública.Un área común para los robots es en entornos universitarios.Los jóvenes estudiantes suelen llevarse autocares antiguos, heredados de familiares o comprados de segunda mano, por lo que los delincuentes se desplazan por las instalaciones de las instalaciones desde primera hora de la mañana para sustraer estas piezas.Tienes que estar registrado para poder escribir comentarios.© Joly Digital |Rioja 13, Entreplanta.41001 Sevilla