La función del catalizador es reducir las emisiones de gases contaminantes en los vehículos y está ubicado en la parte de abajo. >Suministrada
La función del catalizador es reducir las emisiones de gases contaminantes en los vehículos y está ubicado en la parte de abajo. >Suministrada
La Policía de Puerto Rico investiga el hurto de varios catalíticos o catalizadores de vehículos que se encontraban estacionados en el área de Santurce de la ciudad de San Juan.
Uno de los robos fue reportado en la mañana de hoy, lunes, en la avenida Fernández Juncos.
El querellante indicó que estacionó su Mitsubishi Outlander del 2020 frente al edificio 902 y al regresar encendió el carro y se percató que el vehículo hizo un ruido fuerte e inusual.
Al verificar, descubrió que la guagua no tenía la pieza.
Por otro lado, otra persona reportó que una persona también removió el catalítico de su vehículo, descrito también como un Mitsubishi Outlander, pero del año 2021.
El atraco también ocurrió en la avenida Fernández Juncos.
La agente Deborah Castillo, de la División de Delitos contra la Propiedad del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de San Juan se hizo cargo de la pesquisa.
En febrero, la Policía alertó a los conductores para que tomen precauciones en cuanto a los lugares en donde dejan estacionados los vehículos, y detalló estrategias para evitar que esta pieza sea robada.
El alto precio en el mercado negro de metales preciosos como el rodio, el paladio y el platino ha provocado el incremento en el robo de los catalizadores, modalidad criminal que existe desde hace varios años en países de Europa.
El catalizador es un componente del sistema de escape para reducir en los vehículos la emisión de gases contaminantes y está ubicado en la parte de abajo. La pieza tiene un panel de cerámica con un recubrimiento de paladio, rodio y platino que —al entrar en contacto con los gases nocivos— reaccionan y generan gases nobles o inertes que son menos contaminantes.
Los ladrones procuran que el carro lleve tiempo estacionado para no quemarse las manos cuando cometen el delito, luego se acuestan en el piso y con una sierra de batería tipo sable cortan el tubo de escape para sacar el convertidor catalítico.
Cuando el dueño del vehículo enciende el motor se percata del hurto, por el ruido que produce al no tener la pieza.
Las autoridades recomiendan que las personas estacionen los vehículos en áreas bien iluminadas, cerca de la entrada de edificios y donde haya mayor tráfico.
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