Hay comunidades para todos los gustos: paisajes de montaña para aventureros, riquísimos platillos y destilados para foodies y arte espectacular.

A dos horas de Guadalajara. Nadie sabe a ciencia cierta cómo se formó el Valle de los Enigmas o Las Piedrotas, un paisaje marcado por grandes monolitos amontonados, como si los hubiera arrojado un gigante. Se ha dicho que son meteoritos o rastros dejados por un antiguo curso de agua. Lo que sí sabemos es que son espectaculares y a su alrededor se han instalado diversos servicios turísticos, entre ellos, paseos a caballo, descensos a rappel y hasta puestos de antojitos y nieves de garrafa.

En Tapalpa también se encuentra El Salto del Nogal, la cascada más alta de Jalisco. Cae en dos "escalones" y tiene 105 metros de altura.

Su centro histórico, caracterizado por casitas blancas, techos de teja y balcones, es muy "instagrameable".

Es uno de los centros artesanales más importantes de México: cerámica, madera, latón, piel y vidrio son tan solo algunos de los materiales que se trabajan en Tlaquepaque. Date una vuelta por el Andador Independencia: no solo encontrarás artesanías típicas, sino galerías de arte con piezas únicas y coloridas, como la de Rodo Padilla, creador de las adorables esculturas de los "gorditos"; Martha Figueroa (diseño de muebles); Sergio Bustamante, famoso por sus piezas surrealistas; o la de Carlos & Albert, de joyería, escultura y pintura.

Pasa una tarde en El Parián, una construcción colonial donde se concentran restaurantes y bares amenizados con música de mariachi. Durante tu visita incluye las tiendas tradicionales Nuestros Dulces.

Un puente colgante de 350 metros de largo es uno de los principales atractivos de este pueblo en la Sierra del Tigre. Pertenece a Mundo Aventura, un parque de naturaleza con circuitos de tirolesas (uno de ellos de casi dos kilómetros), gotcha y cuatrimotos.

Si te gusta contemplar el paisaje más que la adrenalina, explora el corredor natural Parque Jardín Encantado. Sobre puentes, en medio de un bosque de coníferas, llegas a la Cascada El Salto, de 35 metros. En Mazamitla son muy comunes las cabañas para una escapada. Destacan Sierra Vista, Bosque Escondido y Monteverde. Este último complejo organiza tours con circuitos de puentes colgantes y visitas a locales, como panaderías o queserías.

Si eres adicto al café, San Sebastián del Oeste será tu opción. Es casi obligatorio probar el café local, la raicilla (un destilado de agave jalisciense).

Lagos de Moreno, Ajijic y Talpa de Allende son otras opciones que puedes tomar en cuenta para tu viaje.

Desde el siglo XVI, Tequila ha sido el centro de producción de tequila y, por eso, el paisaje agavero y sus antiguas instalaciones son Patrimonio de la Humanidad.

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